Después de once partidos ayer sumó de a tres al derrotar a Instituto de Córdoba 2 a 0, con goles de Mario Bolatti y Diego Sosa. Además, los puntos le sirvieron para salir de la zona del descenso. Ayer superó a Instituto achicando las líneas y llegando con varios a definir.No hay mal que dure cien años”, indica el refrán. Así es, ayer Boca Unidos logró cortar una racha negativa que llevaba once partidos sin poder alcanzar el triunfo, jugando en casa o de visitante. Superó a Instituto de Córdoba por 2 a 0 en la continuidad de la 10ª fecha del torneo de la Primera B Nacional de la AFA.
El suspiro de alivio de la gente de Boca Unidos tenía su razón de ser. Es que se cortó la mala racha y ayudado por otros resultados salió de la zona roja del descenso. Pero, además, le dio resultados positivos achicar las líneas hacia arriba y en posesión de la pelota avanzar con determinación y sin dejar en soledad al nueve Pablo Vegetti.
Entonces, después de unos quince minutos en que Instituto manejó la pelota con buena circulación por abajo a través de Ezequiel Videla y la hábil zurda de Ricardo Blanco. Armó el juego y dispuso de una clara situación de gol a los 9’ cuando Malcon Braida encaró en diagonal por la izquierda y cruzó el pase para Guido Mainero quien entró a espalda de todos, sacó el disparo cruzado ante el achique de Arnaldo Giménez y la pelota salió apenas ancho sobre el poste derecho.
Fueron unos quince minutos en los que la predisposición y el mejor juego de la “Gloria” cordobesa primó en el partido, porque en la medida que Boca Unidos comenzó a achicar los espacios, saliendo a presionar más arriba y quitándole la pelota, el juego se fue equilibrando, con Boca Unidos atacando por los extremos y buscando a Pablo Vegetti. Cobraron importancia el despliegue de Osmar Ferreyra y Germán Herrera y en menor medida se asoció Diego Sosa por la derecha, aumentando la presencia local cerca del área de Instituto.
Entonces, después de unos quince minutos en que Instituto manejó la pelota con buena circulación por abajo a través de Ezequiel Videla y la hábil zurda de Ricardo Blanco. Armó el juego y dispuso de una clara situación de gol a los 9’ cuando Malcon Braida encaró en diagonal por la izquierda y cruzó el pase para Guido Mainero quien entró a espalda de todos, sacó el disparo cruzado ante el achique de Arnaldo Giménez y la pelota salió apenas ancho sobre el poste derecho.
Fueron unos quince minutos en los que la predisposición y el mejor juego de la “Gloria” cordobesa primó en el partido, porque en la medida que Boca Unidos comenzó a achicar los espacios, saliendo a presionar más arriba y quitándole la pelota, el juego se fue equilibrando, con Boca Unidos atacando por los extremos y buscando a Pablo Vegetti. Cobraron importancia el despliegue de Osmar Ferreyra y Germán Herrera y en menor medida se asoció Diego Sosa por la derecha, aumentando la presencia local cerca del área de Instituto.
Así, a los 15’ llegó la apertura del marcador. Luego de un tiro de esquina tomó la pelota Ferreyra en el área, intentó la gambeta y al verse obstruido tocó hacia atrás para Mario Bolatti, que acompañaba y el cordobés sacó el remate a colocar, se confió el arquero y no pudo impedir que la pelota entre junto al travesaño.
Enseguida el desahogo del público que festejó con el alma. Es que la gente se ilusionaba otra vez en cortar la racha o “sequía” que atrapaba al equipo correntino. Esa euforia se elevó a las nubes dos minutos después cuando de nuevo atacó Boca Unidos, hubo un despeje corto en el área sobre la derecha que Germán Herrera la devolvió de primera “cacheteando” con el revés del botín izquierdo y entrando por sorpresa Diego Sosa cambió la trayectoria con preciso golpe de cabeza. La pelota entró cerca del segundo palo. Fue el segundo gol cuando el reloj indicaba 17 minutos.
A partir de ahí todo salió a pedir de boca. Instituto sintió el impacto, perdió la postura del comienzo y Boca Unidos, con un rendimiento parejo y ordenado fue mandando en el partido. A veces con más revoluciones de lo necesario en el momento de atacar y sobre todo de definir las situaciones favorables. Hubo un remate del “Malevo” que el arquero dio rebote. A los 35’ el que probó fue Baroni y el balón salió ancho junto al ángulo. Y a cuatro del final del primer tiempo, Germán Rodríguez Rojas cortó en la zona media, entregó a Herrera que superó al marcador por la izquierda, al entrar al área lo vio a Vegetti, cruzó el pase bajo y el delantero se arrojó sin alcanzar. Una oportunidad inmejorable porque si la tocaba era gol, con el arquero fuera de acción.
Apenas iniciado el segundo tiempo se lo vio a Instituto más adelantado tratando de descontar y tras un tiro de esquina un cabezazo del defensor Víctor López se perdió sobre el travesaño.
Enseguida el desahogo del público que festejó con el alma. Es que la gente se ilusionaba otra vez en cortar la racha o “sequía” que atrapaba al equipo correntino. Esa euforia se elevó a las nubes dos minutos después cuando de nuevo atacó Boca Unidos, hubo un despeje corto en el área sobre la derecha que Germán Herrera la devolvió de primera “cacheteando” con el revés del botín izquierdo y entrando por sorpresa Diego Sosa cambió la trayectoria con preciso golpe de cabeza. La pelota entró cerca del segundo palo. Fue el segundo gol cuando el reloj indicaba 17 minutos.
A partir de ahí todo salió a pedir de boca. Instituto sintió el impacto, perdió la postura del comienzo y Boca Unidos, con un rendimiento parejo y ordenado fue mandando en el partido. A veces con más revoluciones de lo necesario en el momento de atacar y sobre todo de definir las situaciones favorables. Hubo un remate del “Malevo” que el arquero dio rebote. A los 35’ el que probó fue Baroni y el balón salió ancho junto al ángulo. Y a cuatro del final del primer tiempo, Germán Rodríguez Rojas cortó en la zona media, entregó a Herrera que superó al marcador por la izquierda, al entrar al área lo vio a Vegetti, cruzó el pase bajo y el delantero se arrojó sin alcanzar. Una oportunidad inmejorable porque si la tocaba era gol, con el arquero fuera de acción.
Apenas iniciado el segundo tiempo se lo vio a Instituto más adelantado tratando de descontar y tras un tiro de esquina un cabezazo del defensor Víctor López se perdió sobre el travesaño.
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Fue la única opción favorable a la “Gloria” del segundo tiempo. Después todo fue de Boca Unidos. Entró Diego Sánchez Paredes en lugar de Bolatti y el equipo siguió mandando en el partido. Un pase de Ferreyra siguió con remate cruzado de Vegetti que encontró bien ubicado al arquero. A los 29’ un fuerte disparo del “Malevo” salió sobre el travesaño con el hummmá de la gente. El local aprovechaba bien los espacios y también el cansancio de Instituto, dos veces Diego Sosa no llegó por centímetros a conectar ante el arquero y a los 37’ fue Germán Herrera quien se filtró encarando en cortada desde la izquierda pero su remate de derecha se fue arriba del travesaño. Hubiera sido la coronación de un buen desempeño del joven volante ofensivo de Boca Unidos.
En los últimos minutos, el local siguió mostrando supremacía, bien parado en el fondo, con presencia en el medio y sin dejar de tener en la mira el arco rival. Fue más que Instituto y dejó la sensación de que persistir en esta postura, este triunfo puede implicar el comienzo de una recuperación definitiva. El sábado en Gualeguaychú se podrá apreciar si Boca Unidos consolida lo que insinuó cuando enfrente a Juventud Unida que está en el lote de arriba en la tabla. Ayer exhibió el primer síntoma de mejoría, su gente espera que lo acentúe en el futuro y termine la temporada rebosante de salud.
En los últimos minutos, el local siguió mostrando supremacía, bien parado en el fondo, con presencia en el medio y sin dejar de tener en la mira el arco rival. Fue más que Instituto y dejó la sensación de que persistir en esta postura, este triunfo puede implicar el comienzo de una recuperación definitiva. El sábado en Gualeguaychú se podrá apreciar si Boca Unidos consolida lo que insinuó cuando enfrente a Juventud Unida que está en el lote de arriba en la tabla. Ayer exhibió el primer síntoma de mejoría, su gente espera que lo acentúe en el futuro y termine la temporada rebosante de salud.
DIARIO EPOCA
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