La que fue una noche histórica, primer clásico del 2016 y tercero de la temporada, donde el Fortín Rojinegro se lució frente al pueblo correntino para presentar un espectáculo del más alto nivel, se vió empañada por un acto de vandalismo.
Con el estadio colmado de público,
las ventas de entradas agotadas y las dos parcialidades alentando a sus
respectivos equipos. Además de contar dentro del rectángulo de juego con un
cotejo que fue para alquilar balcones, vibrante y emotivo por donde se lo mire,
tenemos que anunciar algo que son de las cosas que uno menos espera después de
semejante puesta en escena donde en la zona visitante destrozaron la cartelería
que forman parte de las instalaciones del Fortín Rojinegro y estas fueron
arrojadas sobre la manga de salida de los jugadores al finalizar el encuentro.
Desde la dirigencia de San Martín
que cuenta con Alberto Sottile como
Presidente, se repudia todo hecho de violencia y destrucción de todo tipo de
material que con esfuerzo el Club trabaja para brindar una imagen acorde a lo
que presenta nuestra Liga Nacional en busca del crecimiento de un evento masivo
como lo es el clásico frente a Regatas y la camaradería de ambas partes.
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