“Le ganamos al mejor equipo”, dijo Nicolás Casalánguida

Antes de la gira por Entre Ríos en el bunker de Regatas Corrientes todo era desilusión. Sin embargo, tras los triunfos en Concordia y Paraná, el “Fantasma” se aferró a una ilusión, que se potencio con la gran victoria ante Ciclista Olímpico de La Banda por 89 a 81. No sólo por los puntos logrados, sino también por la jerarquía del rival.

“Le ganamos al mejor equipo. Está clarísimo que este es el número uno de la Liga Nacional porque tiene rendimiento colectivo, y los rendimientos individuales están en un momento óptimo”, comenzó diciendo el entrenador de Regatas Corrientes, Nicolás Casalánguida.

“Pero también es cierto que ellos adolecen de un jugador desequilibrante, uno de los más desequilibrantes de la competencia, que es su centro. Para ellos es muy importante Williams (Justin), y nosotros pudimos aprovechar en algunos aspectos su ausencia”, continuó el técnico.

CUESTION DE ACTITUD

Consultado por el juego, y por dónde paso la clave del triunfo, Casalánguida dijo que “me voy muy contento con la actitud del equipo. El primer tiempo demostramos que había una intensidad defensiva acorde a lo que necesitábamos. Una concentración acorde al tipo de partido que se jugaba”.

“Nosotros veníamos perdiendo los últimos tres partidos de local (Antenas, Peñarol, Bahía), y el último que ganamos fue frente a Quimsa, que también nos demando una exigencia en cuento a intensidad y concentración, parecido a este juego”, remarcó.

VOLVIO LA ROTACION

Al preguntarle qué es lo que más le gustó el equipo, el coach dijo que “nos vamos contentos con la rotación que tuvimos, que eso nos permitió mantener la intensidad. El segundo tiempo no fue tan bueno como nos hubiese gustado a nivel defensivo, pero si nos permitió llevarnos un partido que para nosotros es valiosísimo”.

“El triunfo nos permite seguir ilusionados con la posibilidad de ingresar a playoffs, que es hoy el objetivo, una vez cumplido el objetivo de no pelear por la permanencia. Así que el objetivo ahora es seguir por esta senda y buscar las chances, las pocas chances, que nos quedan de ingresar a playoffs”, enfatizó.

EL CIERRE BAJO PRESION

En cuánto el cierre, en donde parecía que Olímpico se lo llevaba de atropellada, Casalánguida dijo que “el equipo tuvo cierta claridad, cierta seguridad, para tomar determinaciones en el momento que Olímpico comenzó a acercarse, con decisiones en velocidad, en sus transiciones, que es el estilo que viene teniendo”.

“Fue muy importante porque en los últimos partidos de local adolecimos de ello, en la seguridad en la toma de decisiones en momentos críticos. Y el equipo tuvo seguridad y por eso pudimos resolver bien el partido, por eso pudimos quedarnos con un cierre parejo”, remarcó.

“También hay que reconocer que tuvimos un momento de lucidez en cuanto a las asistencias. El equipo volvió a pasarse bien el balón, que hace tiempo no nos destacábamos en ese aspecto, y eso para nosotros es importante. Pocas pérdidas, más asistencias que pérdidas, son puntos que solidificaron las intensiones y energías que teníamos”, prosiguió señalando.

UN LEON EN LA PINTURA

Consultado por la lucha aérea y por el gran trajo de Pablo Espinoza (16 puntos y 13 rebotes), el entrenador señaló que “en la faceta de rebotes se fundamenta lo de la actitud del equipo que hacíamos referencia, de pelear todos los balones. En el primer cuarto ya teníamos cuatro rebotes ofensivos, y eso es producto de la intensión, de la energía, del querer”.

“Pablo Espinoza hizo un trabajo defensivo brillante, no solamente sumando en rebotes sino también defendiendo a Van Lacke (Federico) en los momentos importantes, bancándose a los grandes. Pablo hace esos trabajos, que por ahí no brillan en la parte ofensiva, pero si son muy importantes para el equipo, y hoy su producción fue vital”, continuó.

EL EQUIPO QUE QUEREMOS

“Rebotes, pocas pérdidas, y buenas asistencias nos vamos pareciendo al equipo que tenemos intenciones de ser. Quizás es tarde en la temporada. Quizás nos estamos acercando al equipo que queremos ser tarde, o quizás no. Si seguimos por esta senda, y algún resultado nos acompaña quizás no sea tarde”, dijo Casalánguida.

“Lo importante es que nosotros hasta el último partido demostremos el grado de interés que tiene el equipo de dejar una mejor imagen. Así que cada partido que nos queda lo tenemos que vivir como el último y tratar de fortalecer esas mínimas posibilidades que tenemos, pero posibilidades al fin, en base a buen juego y victorias. Después los otros resultados ya no dependen de nosotros. Nosotros tenemos que hacer nuestro trabajo y esperar”, finalizó.