El malestar de la gente se hizo sentir con el silbato final del árbitro Mario Ejarque. Bajó desde las tribunas el conocido estribillo de disconformidad “que se vayan todos” y frases pronunciadas con fastidio hacia el director técnico Christian Bassedas.
Había una razón de ser, Boca Unidos otra vez decepcionó y sufrió la segunda derrota consecutiva, esta vez frente a Gimnasia y Esgrima de Jujuy por 2 a 0, en un partido de la 2ª fecha de la B Nacional, que fue apenas discreto.
Al comienzo fue parejo y después, sin exhibir nada del otro mundo, los jujeños fueron manejando el juego y terminaron justificando el triunfo ante un equipo local que se quedó sin respuestas, tanto que en noventa minutos no dispuso siquiera de una situación de gol. Algo alarmante sin dudas, sobre todo porque los partidos se ganan en el arco de enfrente y si no se lo busca con decisión se torna más complicado convertir.
De esta manera sufrió su segundo traspié del campeonato y fue evidente el malestar de la gente de Boca Unidos. Es más, traslucieron rumores de que la estabilidad del cuerpo técnico tambalea, aún cuando Bassedas afirmó que se encuentran con fuerzas para seguir y confía en que puede revertir la situación delicada en la que está inmersa el equipo que entró en la línea de descenso directo con las dos última derrotas.
El comienzo del encuentro fue bastante equilibrado con Diego Auzqui tratando de armar el circuito ofensivo del “lobo” jujeño con buen manejo y pegada a la pelota con el botín zurdo, bien complementado en el mediocampo por Alejandro Frezzotti y Tesuri. Boca Unidos oponía la entrega y quite de Diego Sánchez Paredes, porque Germán Rodríguez Rojas no se involucró de lleno en el juego y Osmar Ferreyra estuvo fino al comienzo pero después dividió varias pelota. Entonces faltó circulación y volumen de juego en el equipo local, por lo que pocas veces les llegó limpia la pelota a Sosa, Vergetti y Maldonado, los tres más adelantados en el campo de juego, que tampoco pudieron prosperar en la búsqueda del gol.
Como Gimnasia tampoco hacía mucho el encuentro entró en la intrascendencia. Tanto que la única acción de peligro se registró a los 35’ con una pelota en “puñalada” de Auzqui para la diagonal de Tesuri a espalda de la defensa, pero el delantero encontró la oposición de Hilario Navarro quien barrió abajo y la pelota impulsada por el delantero rebotó en su cuerpo salvándose Boca Unidos.
En el segundo tiempo Gimnasia
aumentó rápidamente el marcador. El reloj marcaba 7’
Morales metió un pase desde la izquierda, se distrajo la
defensa y Alexis Blanco picó a buscar el pase, salió presto
Hilario Navarro cubriendo pero tras el choque el balón quedó
en poder del delantero, que libre de marcas puso uno a cero
arriba a los jujeños.
Cuando se esperaba que Boca Unidos movería desde el medio y se lanzaría con furia al ataque. No hubo nada de eso, continuó al mismo ritmo y salvó un gol que le anularon a Vegetti (ya habían sancionado falta antes de que el goleador pateara al arco) no puso en apuros siquiera una vez el arco defendido por Javier Burragui, lo que está develando la orfandad ofensiva de un Boca Unidos, que da la impresión no está preparado para atacar con decisión buscando provocar el desnivel. Eso es lo que se ve desde arriba.
Gimnasia, en cambio, fue ganando en confianza con el correr de los minutos e incluso con toques bajos se adueñó del partido. Tanto que a los 25’ Renzo Tesuri, uno de buen rendimiento, le ganó en velocidad por la izquierda al cruce de Ricardo Martínez, que evitó tocarlo en el área, el centro conectó el ingresado Del Casón, se desvió en el cuerpo de un defensor y sacó provecho Luis Salcés quien con remate cruzado anotó el segundo gol.
Cuando se esperaba que Boca Unidos movería desde el medio y se lanzaría con furia al ataque. No hubo nada de eso, continuó al mismo ritmo y salvó un gol que le anularon a Vegetti (ya habían sancionado falta antes de que el goleador pateara al arco) no puso en apuros siquiera una vez el arco defendido por Javier Burragui, lo que está develando la orfandad ofensiva de un Boca Unidos, que da la impresión no está preparado para atacar con decisión buscando provocar el desnivel. Eso es lo que se ve desde arriba.
Gimnasia, en cambio, fue ganando en confianza con el correr de los minutos e incluso con toques bajos se adueñó del partido. Tanto que a los 25’ Renzo Tesuri, uno de buen rendimiento, le ganó en velocidad por la izquierda al cruce de Ricardo Martínez, que evitó tocarlo en el área, el centro conectó el ingresado Del Casón, se desvió en el cuerpo de un defensor y sacó provecho Luis Salcés quien con remate cruzado anotó el segundo gol.
Este
tanto terminó por derrumbar el atisbo de reacción que había
insinuado Boca Unidos, que siguió con su alarmante falta de
ideas para arrimar peligro al arco defendido por Javier
Burragui. Muy distanciadas una línea de la otra no tuvo
solidez, tanto para atacar como para defenderse en bloque y
la prueba es que le convirtieron dos goles.
Está visto que de no pegar un golpe fuerte de timón, la situación va a ser cada vez más complicada. Con la derrota de ayer Boca Unidos se ubica entre los seis promedios más bajos y hoy por hoy estaría descendiendo de categoría.
Algo impensado hasta no hace mucho tiempo; pero es así y lo que es más grave, no se observa mejoría en el juego. Es más, hasta dejó la sensación de que frente a Villa Dálmine había hecho un poco más; lo que da la pauta de que Boca Unidos fue más de lo mismo y definitivamente el futuro se le va a tornar sombrío si es que no cambia su manera de jugar.
El viernes escribirá la tercera presentación en el campeonato, será en Lomas de Zamora frente a Los Andes a partir de las 21 y si no logra el triunfo se le tornará más oscuro el panorama. Algo que debe evitar que ocurra.
Está visto que de no pegar un golpe fuerte de timón, la situación va a ser cada vez más complicada. Con la derrota de ayer Boca Unidos se ubica entre los seis promedios más bajos y hoy por hoy estaría descendiendo de categoría.
Algo impensado hasta no hace mucho tiempo; pero es así y lo que es más grave, no se observa mejoría en el juego. Es más, hasta dejó la sensación de que frente a Villa Dálmine había hecho un poco más; lo que da la pauta de que Boca Unidos fue más de lo mismo y definitivamente el futuro se le va a tornar sombrío si es que no cambia su manera de jugar.
El viernes escribirá la tercera presentación en el campeonato, será en Lomas de Zamora frente a Los Andes a partir de las 21 y si no logra el triunfo se le tornará más oscuro el panorama. Algo que debe evitar que ocurra.
DIARIO EPOCA.
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