El gran triunfo ante La Unión de Formosa (87 a 59) tuvo varias aristas importantes que Paolo Quinteros, el capitán del equipo, analizó con mucha autocritica y allí dejó en claro que lejos está de conformarse con este presente arrollador, y que el equipo sigue en plena etapa de construcción.
Regatas venció cómodamente a La Unión en
Formosa por 87 a 59, prolongando un inicio espectacular en la Liga Nacional de
Básquetbol (LNB) que lo tiene como único puntero de la Conferencia Norte y con
el mejor record de la competencia, once triunfos en doce presentaciones.
“El
equipo esta haciendo una campaña tremenda. No se está volviendo conformista,
siempre quiere más. Hemos pagado las consecuencias con Libertad en casa, en
donde somos muy fuertes, pero tuvimos un bajón después de ganar dos partidos
importantes de visitante, nos relajamos, y eso nos sirvió de experiencia”,
comenzó diciendo Quinteros.
Al
consultarle si eso pudo haber pasado al inicio del juego, sabiendo que no
estaban Javier Martínez y Fernando Martina, Quinteros señaló que
“pudo haber influido en el rendimiento del primer cuarto. Pero luego entendimos
que si queremos ser un gran equipo no podemos permitirnos este tipo de
relajación, siempre tenemos que estar al cien por cien”.
“No
podemos pensar en el rival, tenemos que pensar en nosotros para ser un equipo
competitivo”, siguió señalando al respecto el jugador franquicia de Regatas
Corrientes, que esta afrontando su cuarta temporada consecutiva en la
institución, con una semifinal y dos finales disputadas, una con título
incluido.
Dejando
de lado la parte mental, la psicológica, y volcados ya al juego propiamente
dicho, Quinteros dijo al respecto que “el primer cuarto fue muy parejo porque
nosotros tuvimos muchas pérdidas, no fuimos claros en ataque y le permitimos
correr a ellos. En el segundo cuarto mejoramos ofensivamente, nos prestamos más
la pelota, buscamos un pase más, y ahí comenzamos a hacer la diferencia”.
“Mucho
tuvo que ver el aporte de la banca, que cuando entraron aportan minutos de
calidad y eso es muy beneficioso para el equipo”, siguió comentando respecto a la
rotación que realizó Nicolás
Casalánguida y que le dio muy buenos resultados, al punto que la banca, al
cabo del primer tiempo, sumó 24 puntos, con un doble sobre el final de Arengo, contra
sólo 23 de todo el equipo formoseño.
“Es
un poco lo que pregona “Nico” (por el entrenador Nicolás Casalánguida), que el equipo no dependa de un solo jugador
y que todos podamos aportar, colaborar, así al rival se le hace también más
difícil”, siguió comentando el gran capitán.
Para
finalizar, y consultado por qué se lo notó tan fastidioso, principalmente en el
segundo tiempo, Quinteros reconoció que
“intento siempre que el equipo juegue precisamente en equipo, buscando
al jugador mejor ubicado, al jugador que esta libre, y hay momentos que el
equipo no juega a eso, y lo hace a base de individualidades”.
“Sinceramente
a mi me molesta. Tengo facilidad para marcar, para llegar al gol, pero siempre
priorizo el pase al compañero mejor ubicado, busco jugar en equipo, y no jugar
así me hace perder la paciencia”, dijo Paolo
Quinteros para finalizar.

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